El organigrama mixto de una empresa está compuesto por un jerarquía vertical por departamentos, y dentro de los mismos hay una respresentación vertical de las diferentes funciones dentro de los mismos.
Su uso se da normalmente en empresas de gran tamaño, donde es complicado discernir entre los diferentes niveles. Asímismo, entre los tipos de organigrama de empresa, es el que más dificultad tiene al diseñarlo, pero cuando se consigue resulta muy sencillo ver todo el organigrama.
Además de la combinación entre organigrama horizontal y vetical, en muchas ocasiones se puede utilizar también un organigrama circular. De ahí su dificultad en diseñarlo, pues mezclamos estructuras organizacionales opuestas. Vamos a ver, a continuación, en qué consiste, cómo diseñarlo y algún ejemplo.
Índice
Un organigrama mixto de una empresa consiste en…
Los organigramas mixtos se utilizan en empresas con un alto volumen de puestos, que además desempeñan diferentes funciones complejas al mismo tiempo. Gracias a este tipo de organigrama, podemos representar también las responsabilidades de cada puesto.
Y es que aunque al principio sea complicado diseñarlo, al final simplifica bastante la relación entre jerarquías y funciones. Una de las ventajas más importantes de este organigrama mixto, es la flexibilidad que da para que los equipos puedan tomar decisiones por sí mismos. Lo vemos cada día en un mercado cada vez más versátil.
Además, una estructura organizacional mixta sirve para simplificar puestos que jerárquicamente están muy definidos pero que corresponden a equipos multifuncionales. Y esto ocurre especialmente, cuando existen cargos especializados y se trabaja por proyectos, por ejemplo. Un misma persona puede tener una posición pero al estar especializada en una determinada función, lo más normal que es que participe en distintos proyectos aplicando su especialización.
Organigrama mixto: ejemplo para dar flexibilidad a la estructura jerárquica
Cada vez hay más empresas que trabajan por proyectos y de manera funcional. Sin embargo, no debemos perder de vista la jerarquía en ciertas compañías con un gran número de puestos. Esta jerarquía puede estar representada de manera circular, situándo al mayor puesto de responsabilidad en el centro de toda la estructura, o diseñando la clásica jerarquía vertical. Si aplicamos un organigrama mixto, vamos a definir también funciones, lo que resulta algo complicado, siendo muy susceptible comenter errores.
A continuación, os presentamos un ejemplo de organigrama mixto de una empresa, cuya estructura jerárquica necesita ser capaz de gestionar imprevisto y cambios continuos.
Como vemos, al comienzo de organigrama se establece una estructura jerárquica, sin embargo en la parte inferior, los equipos se representan por funciones dentro de los departamentos y entre ellos. Es un ejemplo de organigrama mixto de una empresa, de una manera simplificada.
Organigrama mixto: ventajas y desventajas
Entre las ventajas y desventajas de un organigrama mixto, hemos seleccionado las más importantes con el fin de ayudaros a decidiros si en vuestra empresa podéis aplicar una estructura organizacional mixta.
Ventajas del organigrama mixto
- Simplifica estructuras complejas
- Permite dar flexibilidad a estructuras jerárquicas
- Otorga poder de decisión y agilidad para los equipos de trabajo
- Se ajusta mejor a la realidad de la empresa
Desventajas del organigrama mixto
- Puede ser muy complejo de diseñar
- Si no se define bien de principio a fin, puede confundir bastante al equipo
- No es necesario para todas las empresas, sino sólo aquellas en donde se une una amplia estructura jerárquica con un sistema ágil basado en multi-funcionalidades.
Como ves, este organigrama mixto permite estructuras flexibles a las funciones que va teniendo el equipo, y lo relaciona con el cargo jerárquico. Y es que, al final, las grandes compañías cada vez están incorporando organigramas acordes con la realidad de un mercado cada vez más versátil.
