Las características de un proyecto tienen en común un mismo concepto: cada proyecto persigue un objetivo único partido con unos requisitos concretos en un plazo determinado.

Todos los proyectos, por tanto, cumplen con una serie de principios que le hacen ser único frente a otro proyecto. Tales como equipos de trabajo distintos, plazos distintos o requisitos diferentes. De lo contrario pasarían a denominarse procesos.

Los proyectos han de estar orientados a la estrategia de la empresa y siempre mejorando continuamente la siguiente gestión. De ahí la importancia de realizar una buena gestión de proyectos, gracias a habilidades y capacidades que aprovechen cada recurso con el presupuesto y plazos estimados.

A continuación, veremos qué es un proyecto, cuáles son las características principales de un proyecto, incluso, aquellas características de un proyecto productivo. Luego, en función del tipo de proyecto, identificamos unas u otras especificaciones. Hablaremos de los tipos de proyectos más populares y qué requisitos cumplen.

 

características de un proyecto

Características principales de un proyecto

 

Como características principales de un proyecto podemos destacar nueve comunes a todos los tipos de proyectos que existen. Podríamos decir que estas son las características de un proyecto productivo:

  • Un proyecto es único
  • Un proyecto no es una operación rutinaria
  • Un proyecto obtiene sus propios entregables, distintos a cualquier otro proyecto
  • Un proyecto es temporal, cumple unos plazos determinados
  • Un proyecto lo forma un equipo de trabajo distinto a cualquier otro proyecto
  • Un proyecto tiene carácter flexible, se gestiona en función de sus necesidades e imprevistos
  • Un proyecto gestiona mejor la incertidumbre frente a un proceso. Gracias a ese carácter flexible.
  • Un proyecto cuenta con al menos tres fases: planificación, ejecución y entrega.
  • Un proyecto involucra a una serie de personas con unos roles y unas responsabilidades.

Además, todos los proyectos se gestionan en base a cinco fases principales: preparación, planificación, ejecución, seguimiento y entrega. Con metodologías ágiles, muchas de estas etapas se pueden superponer. Tal es el caso de la planificación con la ejecución, entrega y el seguimiento continuo. De esta manera, realizamos planificaciones flexibles que puedan capear adecuadamente cualquier contratiempo. Siempre y cuando llevemos un control real de lo que sucede en el proyecto.

Este tipo de planificación de proyectos se realiza gracia a herramientas productivas como Sinnaps, con las que realizar todos los cambios necesarios durante cualquier fase del proyecto, viendo en cada momento cómo afectará a la totalidad del proyecto y re-calculando la mejor ruta de trabajo tras cada modificación. Sinnaps planifica siguiendo una metodología ágil, en combinación con una metodología predictiva. 

En este curso, Richard Balet, fundador y CEO de Sinnaps, te explica cómo aplicar técnicas combinadas de gestión en tus proyectos. Y distingue qué tipo de metodología conviene seguir, según el tipo de proyecto.

 

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características de un proyecto

 

Los proyectos tienen también unos elementos en común, a partir de los cuales gira toda su gestión. Estos son:

  • Alcance
  • Tiempo
  • Integración o planificación de actividades
  • Coste
  • Calidad
  • Gestión de interesados
  • Comunicaciones
  • Gestión del riesgo y la incertidumbre
  • Gestión del equipo de trabajo
  • Abastecimiento con material necesario

Todos estos elementos y características de un proyecto son clave si queremos introducirnos en el mundo del Project Management. Ahora bien, dependiendo del tipo de proyecto, éstos se gestionarán siguiendo diferentes consideraciones.

Así pues y tras analizar qué es un proyecto y sus características, es importante descomponer los tipos de proyectos que existen.

 

Tipos de proyectos y sus características

 

Según las competencias que se desarrollarán dentro de cada proyecto, a veces en conveniente seguir una serie de consideraciones específicas. Distinguimos así entre los diversos tipos de proyectos y sus características.

No es lo mismo gestionar un proyecto en el que se desarrolle un software que un proyecto de arquitectura en el que se construya un puente. Obvio. Por ello, vamos a ver cuáles son las claves que distinguen a cada tipo de proyecto.

 

Características de un proyecto de investigación

 

Los proyectos de investigación se distinguen en que se sabe cuando empiezan pero no cuando terminan. Suelen ser proyectos complejos, en los que existe un alto grado de incertidumbre. Y su tiempo de ejecución se puede llegar a extender a varios años.

Su financiación está ligada a partidas presupuestadas que obligan a congelar el proyecto varias veces. Esto hace que los equipos de trabajo roten y cambien de personal a menudo. De ahí, que la transparencia y el acceso a los datos debe estar muy bien gestionado. Además, existe una gran dependencia a los recursos tecnológicos. Ésta es costosa, por lo que debe existir un detallado seguimiento y aprovechamiento de los recursos utilizados.

 

Características de un proyecto de innovación

 

La innovación está presente en cada sector de actividad. Gracias a ella, evolucionamos todos. Los proyectos de innovación son muy similares a los de investigación, sin embargo en varios aspectos. Los equipos de trabajo suelen ser multidisciplinares. Los profesionales proceden de diferentes áreas, existen unos recursos y un tiempo de trabajo limitado y cerrado. La comunicación es clave para trabajar a un ritmo adecuado y cumplir así con las fechas.

Además, suelen estar ligados a las estrategias de la empresa. Los requerimientos marcados desde un inicio persiguen objetivos estratégicos. Pero también el riesgo y la incertidumbre es elevada. Tenemos que tener en cuenta que en un proyecto de innovación nadie antes ha experimentado, por lo que debemos estar preparados para capear los cambios de última hora.

Por estos motivos, la metodología combinada con la que hacer cambios durante el desarrollo y ver el impacto de éstos antes de aplicarlos es clave en los proyectos de innovación. Precisamente Sinnaps se adapta muy bien a este tipo de proyectos.

 

Características de un proyecto de inversión

 

Los proyectos de inversión son básicamente propuestas de acciones en la que se aporta un capital para la obtención un beneficio futuro. De ahí que la predicción a la hora de gestionarlos debe ser lo más ajustada posible a la realidad. Sin embargo, existirá también un alto porcentaje de incertidumbre. Metodologías como la combinada, ayudarán a buscar el equilibrio entre lo predictivo y lo que no podemos conocer aún.

En los proyectos de inversión, los plazos y un adecuado control y seguimiento de costes son esenciales para cumplir con los objetivos. Además, en muchos de estos proyectos la planificación de hitos será clave para un adecuado control. Podríamos decir que los dos anteriores tipos de proyectos, bien podrían ser también proyectos de inversión.

 

Características de un proyecto educativo

 

Los proyectos educativos son un conjunto de acciones planificadas y organizadas para alcanzar un objetivo educativo. El orden, los plazos y la organización de todas estas acciones son clave para llegar a lo que queremos enseñar. La comunicación aquí es el objetivo en sí mismo. Necesitamos llevar un orden adecuado de conocimientos para saber hacia qué queremos llegar.

Se basan en identificar adecuadamente el problema, para darle una solución ajustada. Se plantea, se planifica, se formula, implementa y se evalúan resultados. Los recursos disponibles y el contexto en el que se desarrolle un proyecto educativo, marcarán su gestión. Existe pues, una adecuada priorización de tareas, sujeta a estos recursos.

El compromiso del equipo de trabajo es esencial. De ahí, que deba existir una motivación grande para la responsabilidad social de un cualquier proyecto educativo. La calidad del resultado es una de las prioridades de este tipo de proyectos.

 

Características de un proyecto social

 

Un proyecto social está vinculado a la sociedad, a una comunidad de individuos que comparten una misma cultura e interactúan entre sí. Su objetivos gira en torno a mejorar las condiciones de vida de la sociedad. Por ello, el aprovechamiento y seguimiento detallado de los recursos y la evolución de la planificación, es fundamental a la hora de gestionar un proyecto social.

Detrás de ellos, suelen estar instituciones no gubernamentales con fondos muy ajustados y con amplias necesidades que cumplir. Aquí se invierte sobre seguro, para garantizar el bienestar de grupos sociales desfavorecidos. Por lo que hay que reducir al máximo posible la incertidumbre. No es tanto encontrar el equilibrio entre riesgo y predicción, como en los proyectos de innovación o investigación. En este caso, todo debe estar muy ajustado: plazos, recursos, rutas de trabajo totalmente optimizadas, etc. Uso de técnicas predictivas para evitar la improvisación. Las personas son sus máximos beneficiarios.

La aplicación web Sinnaps ayuda a este tipo de organizaciones a planificar sus proyectos de manera totalmente predictiva y ajustada a la realidad.

 

Características de un proyecto comunitario

 

Muy similar a los proyectos sociales. Sólo que con una diferencia grande: las propias personas beneficiarias tienen un papel activo durante la ejecución del proyecto. Por eso, la comunicación en estos proyectos es protagonista. Así como la colaboración con documentos e información compartida.

Los proyectos comunitarios forman parte de los proyectos sociales. Su objetivo se centra en mejorar la calidad de las personas. Normalmente, los recursos son muy escasos por lo que muchas de las características de los proyectos sociales encajan con este tipo de gestión.

 

Características de un proyecto socio productivo

 

Los proyectos socio productivos aúnan una serie de acciones con el fin de beneficiar y mejorar la calidad de vida de un grupo de personas. En ellos, el aprovechamiento de recursos es clave, así como la identificación de sinergias productivas y rutas de trabajo optimizadas.

Además, este tipo de proyectos son sostenibles, buscando relaciones equilibradas con el medio ambiente. Su objetivo gira en torno a aprovechar el potencial de toda la comunidad.

 

Características de un proyecto industrial

 

El objetivo de un proyecto industrial está en transformar una materia prima para obtener un bien que satisfaga una determinada necesidad.

Los proyectos industriales parten de un proceso comprobado y contrastado, establecido por un procedimiento a seguir. Sin embargo, los proyectos están siempre buscando la mejora continua en función a la necesidades del mercado. Son líneas de trabajo cuyo objetivo es mejorar esos procesos industriales.

El correcto uso de los recursos así como la adecuada planificación de las distintas actividades, dará como resultado productos o servicios de un grado de calidad esperado.

 

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